Reseña de 'El hombre invisible', de H.G. Wells

Como ya anuncié hace unas semanas, dedicaría este mes de julio y parte de agosto a leer una literatura más clásica y decidí comenzar por el autor H.G. Wells, que como muchos sabréis es uno de los primeros escritores de ciencia ficción de la historia moderna de la literatura. Me propuse leer algunas de sus obras más célebres y me decanté por 'El hombre invisible' como primer aperitivo y la verdad es que me ha abierto el apetito para seguir leyendo sus novelas. 
Vamos a situarnos antes de meternos de lleno en la reseña. H. G, Wells fue un escritor e historiador británico que tuvo su máximo apogeo a finales del siglo XIX. En aquella época y tras la publicación de algunas de las novelas que le hicieron más famoso, la mayoría de ellas de ciencia ficción y fantasía, empezó a ser considerado como un sucesor de Julio Verne. 'El hombre invisible' es solo una de las más importantes novelas que escribió Wells. 'La guerra de los mundos', 'La isla del doctor Moreau', 'La máquina del tiempo'... son algunos de los otros títulos que hicieron de Wells un escritor adelantado a su tiempo y sobre todo visionario
Porque esa es la única palabra que me viene a la cabeza cuando quiero definir a H.G. Wells. Después de la lectura de 'El hombre invisible', de la que poco o nada sabía, he descubierto a un autor adelantado a su tiempo, con un inconmensurable afán por la investigación de esas cosas que no tienen una explicación aparente. Me imagino que en la época en que escribió 'El hombre invisible' debió encontrarse con muchos detractores, ya que la premisa del libro parte de la teoría de que si se cambia el índice refractivo de una persona para coincidir con el del aire y su cuerpo no absorbe ni refleja la luz, se volverá invisible. Imaginad lo que debió significar esta novela en 1897, año en el que se publicó. Por no hablar de que lo que Wells escribió lo hemos visto por activa y por pasiva en otras muchas novelas y en el cine. Sentó un precedente que hoy en día sigue sirviendo de inspiración a otros escritores y guionistas. 
Pero es que además 'El hombre invisible' tiene ciertos pasajes de miedo y suspense que logran sobrecoger al lector. La manera en que Wells describe estas partes está concebida de tal forma que resulta muy sencillo sentir angustia por los personajes a los que el hombre invisible acecha


Es una novela que se lee rápido, aunque la segunda mitad de la misma, referida a las explicaciones que Griffin otorga a un antiguo colega que se cruza en su camino, el doctor Kemp, hay que leerla con un poco más de detenimiento para comprender las delirantes motivaciones que le llevan a probar el experimento en su propio cuerpo. Porque una cosa está clara: Wells nos presenta a un protagonista por el es complicado sentir empatía, grosero, altivo y claramente trastornado
Como buena obra del siglo XIX, 'El hombre invisible' también tiene su trasfondo moralizante, o al menos es lo que yo he querido entender tras finalizar su lectura. En primer lugar, la moraleja más evidente y que no resulta sorpresa alguna, sería la de que la ciencia, a pesar de su incuestionable utilidad, puede convertirse en un arma peligrosa si no se sabe emplearla como es debido, o lo que podría resumirse en que no se puede jugar a ser Dios sin sufrir las consecuencias. En otras palabras, lo que Wells plantea con esta novela es que el lector se pregunte dónde empiezan y terminan los límites morales y éticos de la experimentación científica. Buena reflexión, ¿verdad?


Me alegro de haber comenzado este ciclo de H.G Wells porque me da la sensación que es uno de esos escritores cuyas historias podrían ser extrapoladas a la época actual sin ningún problema. Además, me encanta el hecho de que fuera tan rompedor con sus argumentos y que a través de ellos pretendiera dar ejemplo y hacer pensar a los lectores. Ahora sí que le tengo ganas a 'La guerra de los mundos'
Tras la lectura de 'El hombre invisible' me puse un poco a investigar sobre H.G Wells y me sorprendió encontrar bellas y acertadas citas como las que comparto aquí con vosotros.

 "Si no acabamos con la guerra, la guerra acabará con nosotros."
"A mi juicio, el mejor gobierno es el que deja a la gente más tiempo en paz."
"La historia humana es en esencia una historia de ideas."

Veredicto


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